Anecdotario de un veterinario
Hay días duros de trabajo y otros que, gracias a vosotros, se hacen de lo más divertidos.
Algunos de nuestros clientes y amigos nos han autorizado a escribir estos momentos vividos en nuestra clínica veterinaria en nuestro anecdotario, y con mucho cariño queremos compartirlo con todos vosotros para sacaros una sonrisa y que os alegre el día.
Dudas con la desparasitación
Un caballero vino a vacunar a su perrica:
– Veterinario: ¿Desparasitas a tu perrica?
– Propietario: Sí, sí… Con Diazepam (Valium)
– Veterinario: ¿Qué? ¿Para tranquilizar a las lombrices?
– Propietario: Ay no, perdona… Con Lizipaina. (Pastillas para calmar el picor de garganta)
– Veterinario: (Ah, bueno… Mucho mejor…)
Ojos desorbitados
Señor que viene a vacunar a su perrico:
– Propietario: Recogí al perro de la protectora, y tenía los ojos muy mal, se le salían del cráneo.
– Veterinario: ¿No sería conjuntivitis?
– Propietario: Sí, pues eso.
– Veterinario: (Sin comentarios)
El perrico no paraba de lamer su herida
Una señora que vino a la consulta veterinaria con su perrico porque tenía una herida en una pata, nos contaba que no paraba de chuparse y que cuando lo hacía al final sangraba:
– Veterinario: ¿Tienes “campana”? (Collar isabelino)
– Propietaria: ¿Extractora? Sí, en la cocina, ¿por?
– Veterinario: (no hubo contestación, solo carcajadas en toda la consulta)
Todas estas situaciones fueron producto de un mismo día, muchas gracias a nuestros clientes por dejarnos publicar estas anécdotas que nos alegran los días a los veterinarios en Pamplona.